Esta fue una de las primeras recetas que hice cuando era chica, ya que lleva muy pocos ingredientes y es muy fácil de hacer. No recuerdo de qué recóndito lugar saqué esta fórmula estupenda, en aquella época antigua donde no existía Internet, y hoy en día la hago a ojo…  Para inmortalizarla aquí tuve que hacer y anotar paso por paso. Así traduje todo este místico conocimiento en medidas para que vos también deleites y te deleites con este manjar.
Lo importante es que antes de pasarla al molde pruebes con una cucharita si está bien de azúcar o si le falta (si le sobra un poco de dulzor no se preocupen que luego del horneado no se siente tanto). A mí me gusta más así, sin agregarle nada, aunque unas cucharadas de dulce de leche repostero dentro de la misma preparación cuando se la pasa al molde queda bueniiiisimo! ¡Solo apto para golosos!

¡Además de la receta que te dejo acá escrita, con este video te va a quedar IGUAL al de la foto! (después de todo, es ese mismo).